%0 Book %A Kisic, Drago %D 2015 %T Perú %U http://hdl.handle.net/11445/2340 %X "Como se explicó en cierto detalle en el anterior número de "Coyuntura Económica Latinoamericana", la situación económica heredada por el gobierno del Presidente Fujimori en julio de 1990 corresponde a una crisis sin precedentes en la vida republicana del Perú, que condicionó la naturaleza y magnitud de las medidas que hubieron de tomarse en los meses siguientes. En julio, la economía peruana se hallaba al borde de la hiperinflación, con una tasa promedio mensual de inflación de 38% y un total desmanejo de las variables monetarias. Este total desmanejo de la economía peruana venía acompañado desde hacía dos años por una aguda contracción de los ingresos reales y las oportunidades de empleo. Esto desembocó en una grave recesión del aparato productivo nacional. La crisis económica peruana tenía su contrapartida en el plano social. En el frente externo se vivía una situación igualmente grave. El estado de la actividad comercial externa muestra la gravedad de la situación. El nuevo gobierno inicia su gestión con un conjunto de medidas dictadas el 8 de agosto de 1990, que enfatizaban la necesidad de reordenar los precios relativos de la economía y controlar el déficit vía un estricto manejo de caja, basado en nuevos impuestos de emergencia y financiamiento cero para el Gobierno Central por parte del Banco de Reserva. En resumen, en vísperas de cumplir su primer año, el gobierno ha dado importantes y decididos pasos en pos de la estabilización y la reinserción de la economía en el sistema financiero internacional. No obstante enfrenta en el corto plazo importantes retos, derivados de los resultados recesivos de su diseño y de la lentitud con la que se ha enfrentado el problema fiscal. "