Los círculos de calidad en la gestión del conflicto escolar en la IED Garcés Navas

Para ubicar en un contexto global la problemática que asiste a la escuela en términos de convivencia escolar y gestión del conflicto escolar, la Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura, OEI a través de su publicación especializada en Educación, valores y ci...

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Detalles Bibliográficos
Autores Principales: Bernal Arias, Patricia, Preciado Alferez, Ángela Milena
Formato: Tesis de maestría (Master Thesis)
Lenguaje:Español (Spanish)
Publicado: 2017-04-28
Materias:
Acceso en línea:https://hdl.handle.net/10901/10319
Descripción
Sumario:Para ubicar en un contexto global la problemática que asiste a la escuela en términos de convivencia escolar y gestión del conflicto escolar, la Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura, OEI a través de su publicación especializada en Educación, valores y ciudadanía, trabajo compilado por el Dr. Bernardo Toro y la Dra. Alicia Tallone, resaltan las tareas de humanización y socialización como las que se le han atribuido a la escuela a lo largo de su existencia en su deber ser y hacer. Una de esas tareas es la de la educación para la convivencia basada en los derechos humanos por ser un espacio público y de construcción de lo público y en donde se deben construir espacios para la promoción de dispositivos para la convivencia y ciudadanía en tanto que la escuela tiene una función democratizadora. En este sentido es importante entender el concepto de conflicto. Cerezo Ramírez (2001) lo define como una situación de aprendizaje que se vive en la escuela o una institución, organización o grupo inmerso en un centro de interacción, tradicionalmente tratada de forma punitiva, sancionatoria y excluyente, y que quisiera ser eludida o exterminada. Sin embargo, esta problemática no puede ser exterminada sin acabar con la dinámica de grupos misma de la escuela. La adaptación al medio escolar depende de las relaciones que el estudiante establece con sus compañeros y profesores. Si las relaciones son fluidas y adecuadas, se genera lo que muchos estudiantes llaman como "lo mejor de la escuela", pero cuando no son adecuadas, la escuela se convierte en un lugar poco atractivo para los estudiantes ignorados o rechazados los cuales se encuentran en alto riesgo de sostener relaciones de agresión y victimización y presentar dificultades emocionales, comportamentales y sociales. Cerezo implementó en España su trabajo “sobre la violencia en las aulas”, que consiste en organizar grupos de 5 a 12 personas que se reúnen para identificar y debatir problemas que los convoca a buscar soluciones y esta experiencia se constituye en un gran referente para el presente trabajo, por cuanto tiene una concepción más humanística y holística del conflicto al hacerlo parte de la subjetividad del estudiante y por tanto, inherente a la convivencia escolar. De la misma manera Isabel Fernández (2002) España en su modelo “Alumno – ayudante”, presenta el apoyo entre iguales como un poderoso mecanismo educativo para mejorar el clima escolar, la convivencia y reducir el conflicto escolar. Esta estrategia favorece la participación directa de los estudiantes y las potencialidades de los mismos; se abordan situaciones que pasan desapercibidas a los adultos, mejora el proceso de enseñanza aprendizaje bajo un estilo de relación interpersonal en el que lo prioritario son la escucha y el respeto, de acuerdo a las autoras.